top of page

El Barcelona retoma el vuelo de La Liga

Los no tan habituales reafirman la suplencia de los señalados del Clásico con tres goles en siete minutos y una victoria que sirve para calmar las aguas


Los jugadores del FC Barcelona celebran el gol de Lewandowski | Getty Images


El ocaso del mes de octubre se empieza a vislumbrar acompañado de la claridad que le ponen jugadores como Robert Lewandowski. El mal augurio, la tormenta en el horizonte y el pronóstico de una semana compleja en el temporal azulgrana, ya es agua pasada con la jornada intersemanal que ha enfrentado a Barça y Villareal.

Si el Clásico dejaba como precedente la ineficacia de los extremos en el juego, Xavi ponía remedio ante los de Emery. Nombres renovados en un once con variaciones y protagonismo para los que se encargan de estirar el campo. Ansu Fati vive en la dicotomía de ilusión y angustia por mostrar su abanico de cualidades. El gol como alivio, liberación. La connotación de la palabra demostrar es abrumadora, pero él, sin embargo, sigue a lo suyo marcando de nuevo a su víctima preferida, el Villareal. La entidad barcelonista se encomienda al rendimiento del '10' como pilar sobre el que construir un ataque poco efectivo en sus últimos duelos.


Tirón de orejas

No solo ha habido un toque de atención para Raphinha y Dembélé, Busquets y Eric García también partían desde el banquillo. Ambos fueron dos de los nombres más señalados en el Bernabéu. Frenkie de Jong se ocupaba de comandar la medular como pivote. El neerlandés, con gran personalidad, mostraba que tiene las cualidades necesarias para ser el termómetro titular del conjunto culé. Activo en las recuperaciones, siguiendo a sus rivales hasta la saciedad y superando líneas como solo él sabe hacer. Un Range Rover en toda regla. Incrustado entre centrales, como cuando Koeman regentaba el banquillo, ha sido importante para conectar la zaga con la zona de ataque. Las molestias en los gemelos advertían precaución y la moneda de cambio en su posición para dormir y acabar el partido.


Frenkie de Jong y Jordi Alba se abrazan y festejan | Eric Alonso, Getty Images


Mejora defensiva para potenciar el ataque

Los primeros compases emparejaban un 4-4-2 del Villareal con Danjuma y Jackson como hombres referencia. La presión de los groguets incomodaba a un Barça impreciso. Espacios a la contra entre los laterales-centrales azulgrana y Marcos Alonso, una vez más, uno de los señalados. Con todo y eso, Jules Koundé, se encargaba de bajar la persiana a cualquier incursión visitante. Otro día más en la oficina para el francés. Su vuelta al ruedo, demuestra lo trascendente que es como hombre referencia, encargándose de tapar las carencias defensivas y potenciar el ataque.

El técnico egarense exigía mayor comprensión en las transiciones rivales. Saber cuándo frenar un contraataque y cometer falta. Lo cierto es que se ha podido notar una mejoría. Gavi, con el nervio que lo caracteriza, ha parado acciones peligrosas y rebañando algunos balones.


La actuación de Pedri y Sergi Roberto ha ayudado al equipo a construir un ataque más coral y ordenado al ritmo de Robert Lewandowski. El polaco, como cuando llega otoño y caen las hojas de los árboles, restaba a la espera de su reencuentro con el gol, su mayor aliado. Fiel compañero de trincheras que en partidos como Inter y Madrid no supo encontrar.

Un balón al primer toque de Jordi Alba llegaba al área de Rulli con nombre y apellidos. El Spotify Camp Nou presenciaba como el reverso del polaco paraba el cronómetro para sellar otra obra más de arte. Las mariposas volvían al estómago de Robert y, con la ambición que lo definen, en una recuperación de Pedri y asistencia de Gavi, tenía tiempo para levantar la cabeza y marcar un segundo tanto en menos de cinco minutos. El portero argentino no llegaba a alcanzar un latigazo imparable y el submarino amarillo empezaba a desistir. No sin antes, encajar el tercero con una gran maniobra de Ferran Torres para asistir al ‘10’. El extremo valenciano ha cuajado una gran actuación leyendo a la perfección las necesidades del partido y demostrando su inteligencia táctica.


Con vistas al domingo, el técnico de Tarrasa daba oxígeno con las entradas de Raphinha, Dembélé, Busquets y Piqué, ambos capitanes con algunos pitos. La conexión de los extremos suplentes, sin gran trascendencia, quedaba cerca de poner el cuarto gol en el electrónico.

“Ya no volamos como antes” ha sido una de las frases célebres del entrenador del Barça con el bajón del equipo, tras el parón de selecciones. Malas actuaciones que daban a entender la preferencia por una aerolínea low cost con turbulencias en citas que serían comprometidas para el futuro a medio-largo plazo. Con la aparente acción-reacción para recuperar sensaciones, Xavi y sus pupilos retoman el vuelo de La Liga con más tranquilidad y confianza para afianzarse en la lucha por la primera plaza.


Comments


Logo (2).png

PARTIDO A PARTIDO

Blog de fútbol y baloncesto. Desde el masculino al femenino. Crónicas, opiniones y entrevistas. 

  • Twitter Icono blanco
  • instagram
  • LinkedIn
  • TikTok
bottom of page