Tocará remontada en Londres

Un Barça irreconocible cae derrotado en Montjuïc contra el Chelsea más pragmático (0-1)

Aitana Bonmatí se lamenta en una ocasión clara para las azulgranas | FC Barcelona

Se confirma la semana para el olvido del barcelonismo en Montjuïc. Comenzó con la eliminación del masculino en cuartos de Champions contra el PSG y sigue con la derrota contra pronóstico del femenino en la ida de semifinales contra el Chelsea. Las azulgranas hicieron el peor partido de la temporada con una imagen impropia del equipo. Es la primera vez que el Barça pierde como local desde 2019, y en Champions desde 2018 contra el Lyon. Nunca ha remontado una eliminatoria, siendo el partido de vuelta fuera de casa. Tocará romper con las estadísticas para dale la vuelta a la tortilla en Stamford Bridge y llegar a la final de Bilbao. El Chelsea fue de lo más práctico imponiendo su lógica tirando de contraataques, y con el gol de Cuthbert, encerrándose atrás y con pérdidas de tiempo.

Montjuïc se vistió de azulgrana por segunda vez para recibir al primer equipo femenino con 36.428 espectadores. El público estuco metido desde el minuto 1' animando a su equipo y el equipo se contagió rápido, con la primera ocasión de Graham Hansen que no llegó a empalmar bien. La mayor amenaza del Chelsea eran los contraataques, y al inicio el Barça demostró que también tiene capacidades en estas acciones con insistencia en fase ofensiva. Las azulgranas fueron dominadoras del partido con y sin balón pero la buena presión avanzada de las inglesas no les permitió salir cómodamente. El Chelsea tuvo la más clara a balón parado con un centro de Erin Cuthbert que se envenenó sin encontrar rematadora. El Barça no terminó de conectar ni tampoco de materializar las ocasiones que tuvo y la Champions penaliza. Las londinenses venían dando avisos y Erin Cuthbert abrió la lata en Montjuïc para avanzar contra pronóstico al conjunto Blue por 0-1. 

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FC BARCELONA: Cata Coll; Ona Batlle, Irene Paredes, Ingrid Engen, Fridolina Rolfö; Aitana Bonmatí, Keira Walsh, Patri Guijarro; Graham Hansen, Salma Paralluelo, Mariona Caldentey

CHELSEA FC: Hannah Hampton; Ashley Lawrence, Jessie Carter, Kadeisha Buchanan, Niamh Charles;  Melanie Leupolz, Sjoeke Nüsken, Erin Cuthbert, Johanna Rytting Kaneryd; Mayra Ramírez, Lauren James

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En una de las primeras acciones de la segunda parte, el Barça daba señales de volver a ser el Barça. El dominio y despliegue por el campo se escenificó y en un disparo de Patri Guijarro que impactó en las manos de Ashley Lawrence dentro del área, Frappart consideró que la acción era pena máxima. Mariona estaba dispuesta a lanzar el penalti y desde el VAR se le dijo a Frappart que fuera a ver la acción para revisar las manos de Lawrence por un posible fuera de juego de Salma, que no intervenía en la jugada. Después del riguroso arbitraje del martes en el partido del Barça masculino contra el PSG la afición protestó la decisión ostensiblemente ante la indignación de Montjuïc. Con el marcador favorable, Chelsea volvió a aplicar las tácticas para ir perdiendo tiempo e incluso no devolver el balón dando una imagen muy antideportiva. Las azulgranas por su lado, no tenían el día. No acabaron de estar finas ni en fase ofensiva ni defensiva. En un contraataque Catarina Macario ganó a Patri Guijarro y a Irene Paredes pudiendo convertir el 0-2 y encaminar la eliminatoria para el Chelsea pero la americana en el mano a mano con Cata, mandó el balón a las nubes.

El Barça a pesar de disputar el peor partido de la temporada hasta el momento, no se rindió y siguió buscando un gol para empatar el partido adueñándose del balón y la posesión pero siendo muy imprecisas en la toma de decisiones. Esto se vio reflejado en la última jugada del partido en la que Alexia Putellas tuvo la oportunidad de empatar el encuentro. Salma colgó un balón al área, Lucy Bronze asistió a Alexia Putellas, y la capitana falló a bocajarro ante el lamento de todo el Estadi Olímpic al malbaratar una gran ocasión para poner las tablas en la eliminatoria. El público presente en Montjuïc terminó animando a las suyas entonando el cántico de "sí se puede" confiando en la remontada del FC Barcelona en Stamford Bridge.