Ridículo tras ridículo

El PSG humilla al FC Barcelona en el Camp Nou con un 1-4 y un hat-trick de Kylian Mbappé

FUENTE | FC Barcelona

El FC Barcelona vuelve a hacer el ridículo en Champions. La competición europea se le resiste año tras año y el problema de seguir cosechando éxitos en Europa ha aumentado en los últimos años. Primero empezó con una derrota que no repercutió demasiado, contra la Juventus después de la gran remontada. Luego llegó el fracaso en Roma, seguido del Liverpool y rematándolo contra el Bayern y el 2 a 8.

Los azulgranas recibieron a un PSG lleno de bajas importantes, entre ellas la del crack brasileño y ex de los culés, Neymar. El de São Paulo nunca se ha visto las caras contra su antiguo equipo desde que abandonó la ciudad condal y firmó por los parisinos. Ayer, el PSG, con hambre ganadora, supo demostrar al Barça, que venía de una racha buena, quien tiene más ganas de ganar la Champions. Koeman apostó por un once de gala incorporando la llegada de Piqué de la lesión. El holandés supo jugar bien sus fichas de inicio, pero quien demostró ser digno del escudo barcelonés fue el tercer capitán del equipo. Piqué mostró en el campo que puede ser un líder desde atrás de la plantilla y así lo demostró, con intensidad y mandando a gritos a todos sus compañeros.

Los de Pochettino empezaron avisando a los culés en el primer minuto de partido. Ter Stegen falló un remate de balón que casi lo supo aprovechar Mbappé. El primer susto para los parisinos llegó mucho más tarde, cuando Griezmann perdonó ante el ex-portero del Madrid, Keylor Navas, tras un gran pase interior de Pedri. Con una línea de ataque muy adelantada, los rojiazules provocaron un penalti para los azulgranas. Un balón larguísimo de Messi a De Jong fue el detonante del tiro desde los once metros tras una zancadilla en carrera de Kurzawa ante el neerlandés. El 10 supo aprovechar la ocasión y no perdonó. Messi pegó un latigazo casi a la escuadra que hizo subir el 1-0 al marcador, consiguiendo así su cuarto gol en Champions y de penalti. El tanto activó al astro argentino que llevaba 29 minutos desconectado. La alegría no duró demasiado en el Camp Nou. En el 32 del partido, la estrella del PSG recibió un centro de Verratti dentro del área pequeña del portero, controló demasiado solo, se fue de su compatriota Lenglet y fusiló al alemán, empatando así el encuentro.

El Barça se fue al vestuario con un sabor amargo. Pudieron aguantar el resultado favorecedor pero no supieron hacerlo, no pudieron parar a Mbappé. La segunda parte empezó con buen pie para los parisinos. En el 64 se inició la decaída de los azulgranas. Recibió Florenzi completamente solo a la espalda de Jordi Alba, no le siguió nadie y el centro que puso en el área lo sacó Piqué. El rechazo del catalán acabó parando en los pies de Donatello que no perdonó y desempató el partido. No pasaron ni diez minutos que, en el 70, Kean complicó la vuelta a los de Koeman. Una defensa permisiva a todo tipo de llegadas de balón hizo que el delantero italiano rematase solo ante la portería rival. El resultado marcaba la realidad del encuentro. Con un 1-3 en contra y una intensidad muy floja, el holandés realizó el primer cambio después del tercer tanto del PSG. Los octavos de final lo remató, otra vez, Mbappé. El francés endosó su primer hat-trick en el Camp Nou y en su primera visita en Barcelona con un contraataque de Draxler que supo atraer a los dos defensas para dejar solo al 7.

El FC Barcelona vuelve a hacer el ridículo en Champions. Los parisinos supieron remontar un 1-0 en campo rival y sellaron prácticamente el pase a cuartos de final de la competición europea. Pochettino, con pasado perico, supo manejar el timón de un PSG lleno de bajas y pudo darle a toda su afición la venganza de la remontada de hace cuatro años. Mbappé marchó de su primera visita en Can Barça con un hat-trick debajo del brazo tras un único gol del mejor jugador del mundo.