Siguen siendo los reyes de Copa
- Pau Pedraza Sopena
- 17 abr 2021
- 3 Min. de lectura
El FC Barcelona gana por 0-4 al Athletic Club y consigue levantar la 31a Copa del Rey tras una segunda parte fabulosa
El FC Barcelona ha conseguido su título número 31 de la Copa del Rey, el primero de la nueva era, la de Laporta. El conjunto azulgrana ha viajado a la nueva sede española que, por lo que se está viendo de momento, recibirá los encuentros de fútbol más importantes. La Cartuja, sin público y con solo los familiares de los jugadores, ha vivido una final que quedará marcada en la historia barcelonista.
Koeman ha apostado por la alineación de siempre, pero ha confiado en dos jugadores que no iniciaron el partido de El Clásico. Piqué, que volvía después de perderse cinco partidos con el equipo por su rotura del ligamento interno de la rodilla, saltó al once inicial juntamente con Griezmann, que sustituía a Dembélé.
Los jugadores del Barça nos han presentado un espectáculo fabuloso de fútbol durante los primeros 45 minutos. Los azulgranas han dominado toda la primera parte, siendo claros favoritos para ganar el título dadas las ocasiones generadas. El encuentro ha empezado con un aviso de De Jong mandando el balón al palo al inicio del partido. Ha habido un momento del partido donde el Athletic ha parecido que quería luchar por levantar el trofeo, pero las oportunidades les han durado cinco minutos. El juego culé de la primera parte se ha jugado en la banda derecha, donde el holandés y Dest nos han mostrado un recital futbolístico. Con tanta llegada a portería contraria tras tantos robos de balón al rival, los del holandés han llegado al vestuario sin marcar ningún gol, todo y tener casi toda la posesión de lo que llevaban de partido.
La charla de Koeman en los 15 minutos de descanso les ha servido a los jugadores para poder sacar adelante la final y ganarla. Nada más empezar, Griezmann ha abierto el marcador tras recibir un pase de De Jong en el centro del área del portero donde el francés ha podido rematar con tranquilidad. El tanto del 7 ha motivado a toda la plantilla y, a partir de ese gol, ha empezado la fiesta. Solo han pasado tres minutos para que los culés anotaran el segundo tanto para encarrilar la final. Jordi Alba ha centrado el balón, que iba hacia Messi, pero al no llegarle el esférico, este le llegó a la cabeza de De Jong para que rematara. El festival golero no había terminado y el rey aún no había anotado su gol. Hasta el minuto 68. El astro argentino combinó con el holandés tras irse por la banda derecha como en la final de 2015. Luego, quebró con facilidad al jugador bilbaíno y envió un pase a la red ante Unai Simón. El rey volvió a ser protagonista y no se cansó. Messi, con sed de gol, quería más. En el 72, el de Hospitalet realizó una pared con Griezmann y centró atrás del lateral para Leo. Buscó el primer palo el argentino y esta vez no estuvo fino el portero.
El encuentro ha finalizado con cuatro goles para el FC Barcelona. El capitán ha subido al palco para recoger su primer título y, con una sonrisa en la cara, ha levantado su trofeo número 37. El Barça se proclama campeón de Copa y vuelve a cosechar un título casi dos años después. Los de Koeman machacaron en la segunda parte a un Athletic demasiado endeble y sin carácter finalista. Fue la final de De Jong, pero también de Messi y Piqué, que brilló tras llegar muy exigido físicamente. El Barça olvida la derrota del Clásico y se carga de motivación para la Liga.
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